Roma en 3 días: qué ver y hacer en una escapada perfecta
Roma no se visita. Roma se vive, se saborea, se camina. Y con tres días por delante, tienes tiempo suficiente para empaparte de lo mejor de la ciudad eterna: su historia, sus calles con encanto, sus plazas míticas y sus rincones más auténticos.
Esta guía para visitar Roma en 3 días te lleva por lo imprescindible, pero también por lugares algo menos turísticos para que no sientas que solo has hecho check en monumentos.
Ponte zapatillas cómodas, abre bien los ojos y prepárate para vivir una de las ciudades más bonitas del mundo.
Día 1: La Roma Imperial y sus clásicos eternos
Coliseo, Foro Romano y Palatino
Tu primer día empieza fuerte. El Coliseo es una de esas maravillas del mundo que impresiona en directo. Compra las entradas online y aprovecha para visitar también el Foro Romano y el Monte Palatino, incluidos en el mismo pase.
Caminar por estas ruinas es como retroceder 2.000 años. Si te gusta la historia, no dudes en hacer una visita guiada.
Piazza Venezia y monumento a Vittorio Emanuele II
Desde el Coliseo, sube por la Via dei Fori Imperiali hasta llegar a Piazza Venezia, donde se alza el colosal “pastel de bodas”, como llaman al monumento blanco a Vittorio Emanuele II.
Puedes subir en ascensor a la terraza y tener unas vistas de 360º de Roma. Merece mucho la pena.
Fontana di Trevi
Pasea después por calles adoquinadas hasta la Fontana di Trevi, uno de los lugares más icónicos de Roma. Aunque suele estar llena de gente, su magia no falla. Lanza una moneda y pide volver (porque volverás, seguro).
Cena en Trastevere
Para acabar el día, cruza el Tíber y piérdete por el barrio de Trastevere. Es juvenil, lleno de vida, de terrazas y trattorias auténticas. Perfecto para una buena carbonara, una copa de vino y ver pasar la noche romana.
Día 2: El Vaticano y el centro artístico de Roma
Vaticano, Basílica de San Pedro y Museos Vaticanos
Empieza el día cruzando a un país nuevo: el Vaticano. Entra en la Basílica de San Pedro, que es impresionante por dentro y por fuera. Si no tienes vértigo, sube a la cúpula para ver Roma desde lo alto.
Después, entra a los Museos Vaticanos (reserva online) y déjate maravillar por los pasillos infinitos de arte hasta llegar a la joya: la Capilla Sixtina de Miguel Ángel.
Castel Sant’Angelo y paseo junto al Tíber
A la salida, camina hasta el Castel Sant’Angelo, una fortaleza-puente que conecta la historia del Imperio y del Papado. Sube a la terraza si te quedan fuerzas. Luego relájate con un paseo por el río Tíber hacia el centro.
Piazza Navona y Panteón
Por la tarde, llega a una de las plazas más bellas de Roma: Piazza Navona, llena de fuentes barrocas, artistas callejeros y ambiente. Muy cerca está el Panteón, uno de los edificios mejor conservados de la Roma clásica.
Cena por Campo de’ Fiori o Piazza Farnese
Estas zonas están llenas de vida y buena comida. Puedes terminar el día con una buena pizza al horno de leña o unos antipasti clásicos.
Día 3: Roma alternativa, bohemia y con vistas
Plaza de España y Via del Corso
Comienza el día subiendo las famosas escaleras de la Plaza de España. Desde arriba tienes buenas vistas y, si quieres compras, la Via del Corso es perfecta para ir bajando hasta el centro.
Villa Borghese y mirador del Pincio
Tómate un respiro verde en los jardines de Villa Borghese, el pulmón natural de Roma. Alquila una bici, pasea tranquilamente y acércate al mirador del Pincio para unas vistas espectaculares.
Basílica de San Clemente y callejear sin rumbo
Si te queda tiempo, visita la Basílica de San Clemente, que tiene varias capas subterráneas de historia. Otra opción es simplemente caminar sin mapa por zonas como el barrio judío, el Gueto o Monti, donde descubrirás tiendas únicas, plazas tranquilas y cafeterías con encanto.
Puesta de sol desde el Gianicolo
Termina tu viaje con una de las mejores panorámicas de Roma: desde la colina del Gianicolo. Pocos turistas llegan hasta aquí, pero la vista del skyline romano al atardecer es inolvidable. Llévate algo para picar y siéntate a disfrutar del momento.
Consejos prácticos para tu viaje a Roma en 3 días
- Dónde dormir: Trastevere si buscas ambiente, Termini si quieres conexión de transporte o Monti si te gusta lo local.
- Transporte: Puedes hacer casi todo caminando, pero también hay bonos de metro/bus de 72 horas si lo necesitas.
- Mejor época: Primavera (abril-junio) y otoño (septiembre-octubre). Evita agosto.
- Qué llevar: Calzado cómodo, botella de agua reutilizable y mucha memoria en el móvil para las fotos.
¿Vale la pena visitar Roma en 3 días?
Sin duda. Con tres días en Roma puedes ver lo esencial, disfrutar con calma y hasta darte el lujo de improvisar. La ciudad combina a la perfección su pasado imperial con la vida moderna, y cada esquina tiene una historia, una iglesia, una fuente o una trattoria esperando.
Roma no es solo un destino. Es una experiencia. Y tres días son el punto de partida perfecto para enamorarte.
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